Una de las razones por las cuáles los millenials renunciamos al trabajo es cuando un empleo no nos define. Una parte fundamental consiste en conocer gente nueva y lograr relaciones estrechas. Por eso, hicimos esta lista con 7 tipos de compañeros de trabajo y lo que puedes esperar con esos perfiles.
Según un estudio de LinkedIn, el 46% de los profesionales cree que tener amigos en el trabajo es importante para ser feliz. Más aún, 7 de cada 10 millenials son propensos a compartir detalles personales con sus colegas, como salarios, relaciones sentimentales y problemas familiares. Más del doble que en generaciones anteriores.
Esos datos no son sorprendentes. Pasamos mucho tiempo en el trabajo y es lógico que queramos establecer vínculos con nuestros colegas, o al menos saber cómo evitar problemas en el trabajo. Así que si quieres conocer 7 típicos perfiles de compañeros de trabajo y saber cómo lidiar con ellos, continúa leyendo.
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Los 7 tipos de compañeros de trabajo que siempre encontrarás en un trabajo
No importa si eliges trabajar en países como Australia o Canadá, o si estás en tu país de residencia, pues es casi seguro que te encuentras con uno de estos tipos de compañeros. #Lol
¡Conócelos!
La sobreprotectora
Aunque los perfiles de compañeros de trabajo son super muy variados, siempre existe alguien que parece la mamá de todos (incluso si se trata de un hombre con aspiración de mamá). En pocas palabras: son personas que aman cuidar de los demás, aunque nadie lo solicite.
En un trabajo puedes distinguirlas porque notan cuando alguien está desanimado y en los momentos difíciles siempre tienen palabras sabias. Es lindo tener alguien que cuide de ti, pero recuerda, madre hay una sola.
El workaholic
Señales para detectar a un adicto al trabajo: no faltó ni el día en que le sacaron una muela, su mayor pesadilla es no tener Wi-Fi en su casa y siempre se lleva trabajo los fines de semana. ¿Conoces a alguien así?
Si la respuesta es sí, debes saber que tener como compañero de trabajo a un workaholic puede ser problemático. Después de todo, se trata de una adicción. Y ni hablar cuando pretenden que uno trabaje al mismo nivel que ellos. ¡Yo sí tengo una vida, perdedor!
El que siempre tiene un problema
¡Uf! Los quejicas son uno de los compañeros de trabajo más insoportables que hay. Al principio, escuchas sus problemas con cordialidad. Tal vez hasta intentas consolarlo. Con el paso de las semanas, descubres la verdad, pero ya es demasiado tarde. Has caído en sus redes, te considera su «amigo».
Mueres por darle una cachetada para que reaccione, pero simplemente terminas evitándolo en los pasillos. Pero, ¿por qué no intentar salvarlo? Puedes motivarlo a aprender a meditar o mencionarle los beneficios del yoga.
Mejor aún, recomiéndale que hay cursos para convertirse en instructor de yoga en países lejanos, como Australia. (Y así de lejitos, mejor) De esa manera, volverá siendo otra persona. O tal vez siga igual que siempre, pero al menos habrá dejado de molestarte varios meses. ¡Checa esta gran recomendación!
Los afortunados
Nunca sabremos cómo lo hacen, pero hay compañeros de trabajo que siempre tienen mucha suerte. Siempre alguien le salva el pellejo si tiene un error. Saca el mejor premio en los sorteos de fin de año, la máquina de café nunca se queda con sus monedas y, si está en la calle, pareciera que el cielo demorase en llover.
Si en tu trabajo conoces a alguien así, no pierdes nada con tenerlo cerca. Tal vez sea contagioso. Y si no, le contarás a tus nietos que lo has visto de cerca.
El fiestero eterno
En todos los trabajos existe ese perfil de compañero que sale excesivamente de fiesta. Llega con lentes oscuros, una imperiosa necesidad de café y menos ganas de hablar que un monje budista. No suelen ser problemáticos, pero durante las primeras horas de la mañana es mejor dejarlos en paz. Acércate a su escritorio cerca del mediodía.
El oloroso
Hay personas que sabes están cerca incluso cuando no las ves. Tener un compañero de trabajo oloroso es una de las experiencias más incómodas. Ellos ni enterados, pero mientras tanto todos hablan de eso, y nadie se atreve a decírselo.
Es entendible, ¿¡cómo le dices «eso» a alguien!? En este caso, lo mejor es tomar coraje y animarse. Los héroes no se quedan callados. Además, si fueras tú, te gustaría que alguien te lo dijera.
Los compañeros fitness
Por último, un típico perfil de compañero de trabajo es el adicto al ejercicio o los fitness. Tienen el bolso del gimnasio adherido al cuerpo y aman el verano. Viven obsesionados con la alimentación saludable, cuentan las proteínas y todas las tardes comen una manzana. Con cáscara, por supuesto.
La ventaja de tener colegas así es que tienen un espíritu enérgico y contagioso. Pero si es de esas personas que quieren convertirte a su religión, abraza a su dios o hazle conocer sus límites de entrada.
Bueno, con esto hemos terminado nuestra lista de 7 tipos de compañeros de trabajo y cómo lidiar con cada uno de ellos. Como verás, muchas veces es bueno tenerlos cerca. Pero en otros casos, la situación es irreparable.
Si te ha tocado, no te preocupes. Aquí te explicamos cómo hacer un currículum y cómo triunfar en una entrevista de trabajo. Después de todo, no hay nada más millenial que levar anclas y buscar nuevos horizontes laborables.
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